Reestructuración de un jardín con 3 rincones sugerentes y diferenciados. Un juego volumétrico de abelias floribundas postratus acompaña a un conjunto elegante de cupressus stricta y un ejemplar de Betula Utilis Dorenboos, seleccionado por la clienta, que se integra en el jardín de la entrada como protagonista de la escena.
La secuencia de ondas verdes volumétricas recortadas continúan en el jardín principal de la zona estancial de la casa, integrándose con un conjunto de Liquidambar Styraciflua a cada esquina del jardín, generando un fondo vegetal luminoso y con contrastes otoñales muy representativos.
El jardín mediterráneo se recrea en una jardinera al fondo de jardín de la zona de la piscina, donde hay una pérgola bioclimática y una zona de barbacoa. Floraciones blancas, naranjas, azuladas en contraste con follajes grises y verdes cenizas, transmiten fragancias y olor a campo, transformando el entorno en un paisaje mediterráneo mágico.